Teología de La Libertad Financiera o Prosperidad Material En el Pueblo de Dios
La gente se fija metas y objetivos en la vida, y no es un secreto que para lograr la mayoría de las cosas se necesita más que fe, se necesitan las obras, el actuar en busca de esas cosas que deseamos y que no tenemos. Muchos nos afanamos y estudiamos para de esta forma tener acceso a un buen empleo o después de tener una profesión o empleo nos esforzamos de manera hasta sobre humana con tal de lograr nuestros anhelos o caprichos en la vida.
Son muchas las iglesias en las cuales se habla solamente de la prosperidad, Libertad Financiera, talleres como Dios y las finanzas, Dios y las riquezas, temas como la manera correcta de administrar nuestro dinero, si se debe pagar o no el diezmo de lo que se coge prestado o del crédito que nos dio un banco o entidad financiera, negocios que son lícitos (ejemplo de ello si un creyente puede prestar a rédito, esto es cobrando un interés, si podemos tener un negocio de compra venta, cooperativas para cristianos, etc.).
Pensamos En Salir de La Pobreza Material y No de La Espiritual
Muchos pensamos en la mejor forma de salir de la crisis, de pagar una hipoteca, conseguir un crédito en una entidad financiera o incursionar en algún tipo de negocio como el mercado inmobiliario, ventas de algunos productos de superación personal, seguros de vida, ventas por Internet o alguna forma de generar los ingresos con el cual solventar las deudas y poder comprar lo que entendemos nos merecemos.
Para esto los predicadores de la prosperidad y de la Libertad financiera o prosperidad económica, te tienen la mejor solución, la más rápida y confiable para ellos y es: "pacta con Dios y siembra para su obra", y ya con esto podrás conseguir el crédito o comprar esa casa que es la casa de tus sueños. Yo por mi parte estoy esperando uno de esos para decirle que me dé ejemplo y me dé la mitad de sus bienes, que siembre en mí para la gloria de Dios, ¡hasta que le duela!
Algunos no hablamos del amor al dinero, el cual dice la biblia, es el origen de todos los males, pero si tenemos amor por las cosas que se compran con el dinero. Esto es porque pensamos que la verdadera prosperidad está en lo material, y la verdad es que no. La verdadera prosperidad es espiritual y la encontramos en la biblia, en el libro de Josué capítulo 1 verso 8, está en guardar la los mandamientos de Dios, de esta forma hará prosperar tu camino, esfuérzate y sé muy valiente y el Señor estará contigo, lámpara es a tus pies su palabra y lumbrera a tu camino.
Si en este mundo no puedes pagar tu hipoteca, ten presente que en el reino de los cielos te esperan calles de oro, y que las aflicciones de este tiempo no se comparan con la gloria venidera. Estudia, trabaja, consigue todo el dinero que puedas, pero recuerda que no es tuyo, las cosas que tenemos en esta vida no son nuestras, sino de Dios, suyos son el oro y la plata y cuando él las pones en nuestras manos, él no nos hace dueños, más bien solo, administradores.
La Libertad financiera o prosperidad económica está en: saber administrar lo que el Señor pone en tus manos, supliendo las necesidades de tu casa, ayudando al prójimo, colaborando con tus diezmos y ofrendas, no gastando en los deleites de la carne, etc. Esa es tu verdadera Libertad financiera o prosperidad económica.
Como cristianos es bueno no perder el foco, las enseñanzas de Jesucristo valen mucho más que las de sus supuestos predicadores y al fin de cuenta únicamente él es nuestro pan de vida. Si estás tentado a sucumbir ante las circunstancias de la vida, recuerda que Dios te da la fuerza para vencer.