En Las Manos de Dios Somos Procesados Como Hace el Alfarero Con el Barro

La Vida y el Ministerio En Las Manos del Alfarero Quien Es Dios

Todo cristiano debe confiar su vida en las manos de Dios el cual igual que el alfarero hace con el barro, le dará la forma que más conviene, estar en las manos de Jesús es un proceso que nos hace parecernos más a él. De la misma forma en que todo en la naturaleza ha pasado por un proceso para tomar su forma, ¡tú y yo también en las manos de nuestro creador!

La Vida y el Ministerio En Las Manos del Alfarero

Si estás dispuesto a poner tu vida en manos de cristo, debes saber que el ara contigo lo mismo que hace el alfarero con el barro, es todo un proceso de echarle agua, darle forma con las manos, ponerlo en un horno caliente, cepillado, pintura y por último el horno más caliente y todo esto con el único objetivo de que el barro sea útil y duradero.

No sé si conoces el proceso de la plata: el platero la mete en el horno y nunca aparta su vista de ella y sólo cuando él mismo se ve reflejado en la plata entonces es el momento en que la saca del horno porque ya está libre de impurezas. La gran verdad es que nuestro amado padre nos quiere ver de la misma manera: totalmente libre de todo tipo de impurezas que encontramos en este mundo.

En Las Manos del Alfarero Somos Procesados


Lo que trato de decirte es que poner tu vida en manos de Dios, tú quedas expuesto a ser procesado como el barro, la plata y el oro y solo cuando ya seas puro, libre de impurezas y tu señor se vea reflejado en ti es el momento en que tus grandes luchas y pruebas van a terminar. No digo las tentaciones del enemigo, pero sí las pruebas impuestas por Dios.


El alfarero se apresura con el barro para que no se seque, lo mete al horno para que no se agriete, lo cepilla para que sea suave y tierno, lo pinta para que su vida tenga color y lo vuelve a meter en un horno más caliente para que su vida sea duradera y al final se obtiene una muy hermosa tacita o vaso de barro. Tu alfarero te quiere como vaso de honra si es que estás dispuesto a pagar el precio.

Un Ministerio En Las Poderosas y Amorosas Manos de Dios


Un ministerio como cristiano es un don de Dios y como tal debe estar en sus manos. Es muy posible que tengas que pasar por duras pruebas y solamente con el objetivo de capacitarte en lo que es necesario que enseñes a otros, pero estar en manos del Señor es garantía de una vida victoriosa y llena de gozo aún en medio del proceso que te cause dolor.

Tengo por experiencia que la mayoría de las cosas que predico ya me tocó vivirla y por eso las entiendo mejor. Que muchos artículos que escribo es justo y cuando estoy pasando por ese proceso, para tener más fundamento para escribir y ayudar a otros y también he visto como muchos artículos son escritos para mi mismo.

Dios te ama y sabe lo que hace, poco importa tu entendimiento en medio de cada situación, lo verdaderamente importante es confiar en tu Salvador. Por testimonio te puedo decir que he iniciado cosas que no se para que son, sólo por tener el sentir de que para algo servirán en un futuro y luego me llevo la sorpresa de que eran una plataforma que Dios estaba creando para bendecirme y conmigo a muchas personas más

Es fundamentalmente importante dejarse guiar por Dios. Alguien te dirá que lo de Dios no tiene lógica y que únicamente hay que obedecer y en la parte de la obediencia sin entender el porqué ni para qué tienen razón, la verdad es que todo lo que el Señor hace tiene lógica, pero una muy superior que la nuestra no puede entender hasta que se nos revela.

Ponte en las manos de Dios, si prefiere decir en las manos de Cristo o como se llama esta web "En las manos del Alfarero". Te aseguro que tu vida será diferente. Muchos se congregan en una iglesia, pero no saben depender del señor, no se dejan guiar, otros piensan que su creador es un mayor domo a quien solo decirle que haga cosas por ellos.

Una vida de oración, ayuno y lectura de la palabra, pero lo más importante, un estilo de vida conforme al cumplimiento de los mandatos y estatutos de la santa biblia, vivir la palabra de forma ejemplar, siendo guiados por el Espíritu Santo es la mejor forma de saber que estamos en las manos de Dios, nuestro alfarero, quien da forma a nuestras vidas.